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CompAir ofrece una gama completa de secadores de aire comprimido eficientes energéticamente y respetuosos con el medio ambiente, incluyendo secadores refrigerantes, desecantes modulares y desecantes sin calor, así como secadores HOC (calor de compresión) y Sub Zero. Todas nuestras tecnologías están diseñadas para ofrecer la máxima fiabilidad, largos ciclos de vida y un fácil acceso al servicio, por lo que, sea cual sea la tecnología que elija, puede estar seguro de que su inversión ofrece un rendimiento innegable. Vea el vídeo para conocer nuestra planta de Fogliano, en Italia, donde se fabrican nuestros productos de secado de aire:
El aire es una mezcla incolora, inodora e insípida de muchos gases, principalmente nitrógeno y oxígeno. Está naturalmente contaminado con partículas sólidas, como polvo, arena, hollín y cristales de sal. Esta contaminación varía en función de los distintos entornos y altitudes.
El vapor de agua es otro ingrediente natural que puede encontrarse en cantidades variables en el aire. La cantidad de vapor de agua y la contaminación del aire desempeñan un papel fundamental en el proceso de compresión y en la calidad del aire suministrado por el compresor.
Las propiedades dañinas y corrosivas del agua son bien conocidas. El aire no tratado a presión atmosférica contiene grandes cantidades de agua y otros contaminantes, como gotas de aceite y partículas de suciedad.
Cuando el aire se comprime, aumenta la concentración de humedad y otros contaminantes. Si se permite que permanezca en el sistema, esta mezcla corrosiva tiene un efecto perjudicial en el equipo neumático, causando paradas de producción innecesarias, deterioro del producto y reducción de la vida útil del equipo.
Los secadores de aire comprimido se utilizan para eliminar la humedad del proceso de compresión, protegiendo los equipos y los productos de los daños y garantizando la calidad del aire limpio y seco.
Funcionamiento seguro
El aire no tratado puede causar corrosión y daños en las tuberías y en la estructura interna de su compresor de aire. Esto puede acabar provocando una avería en el sistema, que le costará tiempo y dinero. El secador de aire comprimido le ayudará a mantener su sistema funcionando sin daños y su operación segura y fiable con resultados a largo plazo.
Producto final de alta calidad
Sea cual sea su aplicación, debe estar seguro de que su producto final es de alta calidad. El aire que contiene vapor de agua puede provocar el deterioro de los productos, lo que puede resultar muy costoso para las empresas. El secador de aire comprimido garantiza que el aire sea puro y esté seco antes de llegar al punto de uso.
Tranquilidad
Los sistemas y procesos de producción modernos exigen un aire comprimido de alta calidad, que se define en las 6 clases descritas en la norma internacional ISO 8573-1:2010, como se muestra en el diagrama siguiente. Esto sólo se consigue con la filtración, la separación del agua y el secado. Puede leer más sobre el uso de las diferentes normas de calidad ISO para planificar su sistema de aire comprimido, en el libro blanco que se encuentra debajo de la selección de productos. Un conocimiento profundo de la calidad del aire comprimido y de las normas de ensayo es indispensable a la hora de diseñar su sistema para alcanzar los niveles de pureza que requiere su aplicación. La Organización Internacional de Normalización (ISO) establece tres normas de este tipo: ISO8573 1, ISO12500 e ISO7183. Las normas que debe aplicar dependerán de los contaminantes específicos que pretenda eliminar y del equipo de depuración en el que se apoye para ello.
Confíe en los potentes secadores de aire comprimido para ofrecer una total tranquilidad a su empresa.
Lea más en el siguiente libro blanco
Una guía para evaluar el rendimiento con ISO 8573, ISO 12500 e ISO 7183
